Robot de cocina

Hace unos meses compre el robot de cocina de Lidl por algo más de trescientos euros, una máquina barata si la comparamos con otras muy famosas, y lo más importante la gran cantidad de recetas que hay disponibles.

Aunque sea una ventaja, tengo que decir que cuando comencé a usarla me di cuenta de que seguir al pie de la letra las instrucciones para cocinar algún plato gastaba mucho tiempo, para colmo en algunos es necesario lavar el recipiente a la mitad. Por eso, no siempre sigo los pasos, algunos los sustituyo o simplemente los elimino, y en la mayoría de las ocasiones cambio los ingredientes.

Quizá la mayor utilidad que le he dado es la de hacer pan, sin necesidad de amasar y en muy pocos pasos. Esto me ha ayudado a elaborar panes con distintas harinas: trigo, espelta, centeno, avena, trigo sarraceno,… y salen bastante buenos.

Recordar que el fabricante de Termomix denunció a Lidl por el robot de este úlimo, y si bien inicialmente la justicia dió la razón al primero, al final y tras recurrir Lidl logró seguir comercializando su producto.